El género Vespa es uno de los cuatro que contiene la familia Vespidae, y a él pertenecen todos los avispones, ampliamente distribuidos por Asia tropical y templada.
Los avispones son más temidos que las avispas, debido a su tamaño.
Vespa sp. (ejemplar disecado procedente de Tailandia)
Sólo dos especies de avispones, Vespa crabro y Vespa orientalis, pueden encontrarse originariamente (como especies no introducidas) fuera de Asia: el primero en Europa (de hecho se trata del avispón europeo, una especie bastante plácida y tímida; especie introducida en Norteamérica) y el segundo, distribuido por Oriente Medio y sur de Europa, también en el norte de África. El resto de los avispones, una veintena de especies, hay que buscarlos en regiones templadas, subtropicales y tropicales del continente asiático.
UN AVISPÓN ASIÁTICO EN EUROPA
Una especie de avispón asiático, la Vespa velutina nigrithorax, ha sido introducida en Europa, probablemente de un modo accidental; se cree llegó a Francia en un contenedor portuario procedente del contienente asiático. Desde Francia el insecto se ha ido expandiendo llegando a España a través de los Pirineos. En 2011 aparece en Galicia.En las fotos de arriba, Vespa velutina fotografiadas en el Parque Natural de Collserola, en la provincia de Barcelona.
El primer año en el que se detectó su presencia en Cataluña fue el 2012, y desde entoces, si bien no se ha observado un incremento excesivo de ella durante los siguientes cinco años en las comarcas catalanas, sí se ha detectado un fuerte crecimiento de sus nidos, así en 2016 se encontraron 116 nidos, y en 2017 un total de 370; estas cifras son muy significativas porque se cree que sólo se detectan el 10% de los nidos existentes. En 2015 se localizó el primer nido en Mallorca.
Según los expertos, Vespa velutina resulta ya imposible de erradicar, pero sí se pueden aplicar medidas de control.
Es importante evitar el mantenimiento del ritmo invasivo de Vespa velutina, porque de otro modo las poblaciones autóctonas de la abeja de la miel quedarían gravemente amenazadas, toda vez que nuestras abejas constituyen un buen alimento para las larvas del avispón asiático invasor, que las ataca y caza para llevárselas a las larvas. También captura moscas y otros insectos; Vespa velutina es uno de los más eficientes cazadores en el mundo de los avispones.
Vespa velutina nigrithorax es originaria del norte de Nepal y China, en zonas geográficas de clima semitropical.
Muchos autores y expertos coinciden en afirmar que Vespa velutina es una especie extraordinariamente defensiva.Todos los ejemplares de Vespa velutina que aparecen en este Blog los he fotografiado en la sierra catalana de Collserola.
DISTINTAS FORMAS DE VESPA VELUTINA
En su tierra natal (que comprende buena parte de Asia: Norte de India, Nepal, China, Taiwán, Tailandia, Vietnam, Malasia, y numerosas islas de Indonesia: Java, Sumatra, Lombok, Timor, Flores, Sumba, Sulawesi) la especie Vespa velutina cuenta con numerosas variaciones en el patrón de coloración, según el área geográfica. La forma nigrithorax (de tórax negro), que es la presente ahora en España, es de las más oscuras. Otras formas de Vespa velutina muestran mayor porcentaje de color claro, como la forma sumbana, de la isla de Sumba (Indonesia). En todos los casos, sin embargo, el patrón de coloración de este avispón, por encima de sus variaciones (según parece por diferencias genéticas y no tanto geográficas o climáticas) cumple una función aposemática, es decir de advertencia para los depredadores, lo mismo también que ocurre en otras especies de avispas.
CICLO ANUAL DE VESPA VELUTINA
En invierno las reinas hibernan fuera de los nidos (en huecos de un árbol, por ejemplo). Hacia febrero- marzo las reinas comienzan la construcción de los nuevos nidos. Ya en primavera nacen las obreras, y el nido se traslada a zonas más altas. Durante el verano el nido y la colonia no paran de crecer, y hacia septiembre-octubre se llega al máximo de individuos en la colonia (1.200-1.800 avispas).
A finales del otoño las nuevas reinas abandonan el nido mientras que la reina inicial y las obreras permanecen en él hasta su muerte.
LAS COLONIAS DE AVISPONES
Todos los avispones son insectos eusociales, que viven en colonias bien estructuradas que se asemejan a las de las chaquetas amarillas (Vespula) con las que están estrechamente emparentados. El número de obreras en un nido depende de la especie y del desarrollo de la colonia. En colonias ya maduras, de Vespa luctuosa luctuosa aproximadamente dos centanares, de Vespa mandarinia japonica unas 250, de Vespa tropica 300, y de Vespa simillima xanthoptera hasta 500. El "avispón de vientre negro", Vespa basalis, nada menos que unas 5000 obreras.
Ya se ha visto que las colonias de Vespa velutina pueden alcanzar los 1.800 individuos.Vespa tropica, ejemplar disecado, Tailandia
Los avispones adultos se alimentan de néctar y azúcares que obtiene de las plantas, pero las larvas son carnívoras y para poder alimentarlas los adultos no dudan en cazar insectos como las abejas. El avispón gigante de Japón dispone de unas poderosas mandíbulas para este fin.
Los avispones emiten feromonas de ataque para que la colonia completa salga a defender el nido amenazado por el enemigo. En el caso de Vespa mandarinia, además puede emitir la feromona de ataque con el objetivo de movilizar a varias obreras para la caza de presas.
EL VENENO DE LOS AVISPONES
Todas obreras del nido poseen un peligroso aguijón que emplean hábilmente para la defensa de la colonia. Ese aguijón no tiene barbas como las de las abejas de la miel, por consiguiente pueden extraer sin problema el aguijón clavado en la víctima y volver a infligir nuevamente otra picadura con él.
El veneno de los avispones contiene acetilcolina, que es un inductor del dolor. En el caso de Vespa mandarinia la acetilcolina está al 5%. El veneno de este avispón contiene una fosfolipasa capaz de disolver las células (la fosfolipasa destruye los componentes de la membrana celular), por eso cuando pica, el envenenamiento deja un orificio en la piel.
Corren historias terribles sobre picaduras de avispones que causaron nefastas lesiones en las víctimas, si no fallecimientos por las múltiples picaduras, etc. En realidad los avispones en su hábitat no son tan peligrosos, pues únicamente actúan en defensa de lo más valioso para ellos: el nido y lo que hay dentro de él, es decir la reina, con capacidad reproductiva y por consiguiente necesaria para la supervivencia de la especie, y las larvas, que serán la generación del futuro, tal como los humanos hacemos con lo nuestro en el día a día. En cuanto a las muertes por picaduras, sean directamente por la acción del veneno o más comúnmente por reacción alérgica de personas sensibles, hay que decir que son realmente excepcionales. Las muertes por tabaco en los fumadores pasivos (los que no fuman pero que están próximos a quienes sí lo hacen inhalando su humo) son infinitamente más numerosas.
Seguidamente paso a mencionar algunas de las especies del género Vespa más interesantes con especial referencia al veneno:
Vespa luctuosa (Saussure, 1854)
El más venenoso de todos los avispones (y uno de los insectos más venenosos del mundo, sólo superado por algunas especies de hormigas). Endémico de las Filipinas.
Se trata de un avispón grande, de hecho el mayor después de Vespa mandarinia.
Veneno:
Vespa luctuosa luctuosa
LD 50 = 1,6 mg/ kg de ratón, vía intravenosa
Producción: 0,43 mg
Vespa mandarinia (Smith, 1852)
El mayor de todos los avispones (concretamente la subespecie japonesa: Vespa mandarinia japonica, de la que más abajo doy más información).
Veneno:
Vespa mandarinia japonica
LD 50 = 4,1 mg/ kg de ratón, en vía intravenosa
LD 50 = 6,1 mg/ kg de ratón, en vía intraperitonal
LD 50 = 24,8 mg/ kg de ratón, en vía subcutánea
Producción = 1,1-1,4 mg
La gran cantidad de veneno que inocula a través de su aguijón de 6 mm de largo lo hace muy peligroso.
Vespa simillima (Smith, 1868)
El conocido como "avispón amarillo japonés" vive en colonias grandes, lo que puede comportar cierto peligro de ataque masivo de sus efectivos con picaduras múltiples. A veces confundido con Vespa mandarinia a pesar de tener un tamaño mucho menor.
Distribuido por Japón, Corea y China. Dos subespecies reconocidas: Vespa simillima simillima y Vespa simillima xanthoptera; esta última es la más común en Japón.
Veneno:
Vespa simillima xanthoptera
LD 50 = 3,1 mg/ kg de ratón, en vía intravenosa
Producción: 0,42 mg de veneno
Vespa tropica (Linnaeus, 1758)
Avispón grande (obreras 24-26 mm, reina hasta 30 mm), fácilmente reconocible por su color negruzco con el segundo segmento abdominal de color amarillo, lo que le vale su nombre popular de "avispón bandeado" (a veces llamado "mayor" para distinguirlo de Vespa affinis o "avispón bandeado menor"); cabeza oscura. De todos modos en su amplia área de distribución, que comprende el sur de Asia, se dan formas con ciertas variaciones, como ocurre en Singapur en donde son encontrados especímenes completamente negros y de mayor tamaño.
Veneno:
Vespa tropica deusta
LD 50 = 2,8 mg/ kg de ratón, vía intravenosa.
Producción: 0,77 mg de veneno.
Capacidad letal de la colonia
En su defensa del nido, los avispones atacan en masa, por lo que para determinar correctamente los efectos del veneno resulta importante evaluar la capacidad letal de toda la colonia, para lo cual basta multiplicar la capacidad letal de una sola obrera (cantidad de veneno que inocula por picadura X la toxicidad de ese veneno) por la cantidad de obreras aptas para picar de que dispone una colonia madura de la especie de que se trate. Por ejemplo: la capacidad letal de una sola obrera de Vespa tropica es de 270 gr/ picadura, que multiplicado por 300 (las obreras que aproximadamente hay en una colonia madura de esta especie) da 84 kg/ colonia.
En este sentido se concluye que el avispón más peligroso para los humanos es Vespa basalis porque sus colonias pueden comprender unas 5.000 obreras dispuestas a picar (récord de una colonia encontrada en Taiwán), lo que arroja una capacidad letal de 675 kg/ colonia en el caso de asumir que la cantidad y toxicidad del veneno de esta especie sea similar a la de la vista Vespa simillima xanthoptera. De hecho recientemente se ha aislado una toxina del veneno de Vespa basalis (conocido como "avispón de vientre negro") y se ha descubierto que posee una potente y letal actividad hemolítica en ratas, ratones y cobayas.
Sobre veneno de especies del género Vespa
"Hornets venoms: lethalities and lethal capacities"
(Justin O. Schmidt, Soichi Yamane, Makoto Matsura, Christopher K. Starr)
Un bello avispón
EL AVISPÓN GIGANTE DE JAPÓN
Es lógico hacer especial referencia a este magnífico animal dado que si lo avispones se caracterizan en general por su gran tamaño, el avispón gigante japonés, cuyo nombre científico es Vespa mandarinia japonica, es el mayor de todos ellos, con reinas que pueden alcanzar 5,5 cm de longitud, y obreras que miden entre 3,5 y 4,5 cm.
El avispón gigante japonés es una subespecie de Vespa mandarinia distribuida en Japón; existen otras subespecies de este avispón difundidas por buena parte de Asia, abundante en China.
El avispón gigante japonés es una criatura realmente admirable: tiene una grande, llamativa y ancha cabeza de color naranja armada de aceradas mandíbulas, también anaranjadas, y con un diente negro, habilitadas para despedazar a sus presas (otros insectos, entre los que figuran las abejas), masticarlas y convertirlas en una papilla que se la ofrecerán a las larvas en el interior del nido; con esas fuertes mandíbulas también corta los pedazos de madera con los que fabrica el nido.
Bien alimentadas, las larvas, a su vez, tras la digestión, producirán un líquido que constituye el principal nutriente para el avispón adulto pues le proporcionará una energía increíble: conocida es la gran resistencia física de estas maravillosas criaturas, capaces de desplazarse grandes distancias. No es casualidad que ese líquido producido por las larvas, una mezcla de aminoácidos, que alimenta a los adultos, haya sido elaborado sintéticamente por el hombre y comercializado como complemento dietético para deportistas.
Vespa mandarinia japonica es, como todos los avispones, un insecto eusocial, cuyos miembros de la colonia viven en un mismo y único nido en el que existe una clara división de castas (reina, obreras, y machos o "zánganos"), cada una con su rol. La reina es la única hembra fecundada y su misión es poner huevos, de donde nacerán las larvas. Comparada con el resto de los miembros de la colonia, la reina es de mayor tamaño. Las hembras no reproductoras son las obreras, que se pasan la mayor parte del día volando desde el nido a los lugares donde está el alimento, o bien buscando materiales para la construcción o ampliación del nido; después, regresan a la colonia.
Todos los avispones en general, y desde luego también el gigante japones, presentan en sus cuerpos una llamativa coloración de tipo aposemática (es decir de advertencia de su potencial peligrosidad). El diseño o modelo suele consistir en colores contrastados (amarillo, naranja o rojizo con negro o marrón oscuro) dispuestos en bandas. En todos los casos el mensaje que se quiere dar es el de no molestar ni atacar a estas criaturas y a sus nidos. Los avispones, no sólo el gigante japonés, nunca atacan sin una buena razón. El ataque masivo es posible gracias a las llamadas "feromonas de alarma", señales químicas que emiten uno o varios individuos cuando son perturbados por un intruso. Estas señales las perciben los demás individuos de la colonia que acuden masivamente a picar con el aguijón al intruso. De esta manera estos valiosos animales logran salvar el nido y a la colonia, garantizando la supervivencia de ésta y, pues, de la especie, necesaria para el ecosistema de su hábitat.
El avispón de patas amarillas Vespa velutina
No obstante su peligrosidad, los avispones se encuentran entre los insectos más bellos del mundo.